Un día como hoy, en 1841, nació, el que posiblemente fuera el más representativo de la pintura impresionista, Pierre-August Renoir.
Pierre-Auguste Renoir, fué un pintor francés impresionista, pintó pasisajes y escenas cotidianas de su sociedad, en la segunda parte de su carrera mostró mayor interés por la pintura de cuerpos femeninos en paisajes, frecuentemente inspirados en otras obras clásicas renacentistas y barrocas.
Renoir ofreció un punto de vista más sensual del impresionismo, más dirigida a lo ornamental y a la belleza. Habitualmente no incide en los aspectos más ásperos de la vida moderna, como si hicieron en algunas ocasiones, Manet o Van Gogh.
Estuvo entre lo moderno y lo tradicional; mantuvo una buena relación con los pintores de su siglo XVIII y que mostraban la sociedad galante del Rococó, como Watteau.
En sus obras ofrece a menudo la alegría de vivir, aunque los protagonistas sean rudos trabajadores. En todos los casos son personas que se divierten, en una naturaleza agradable. En cierta medida, por este motivo, se le puede comparar con Henri Matisse, al margen de sus claros estilos diferentes. En sus cuadros hay temas de flores, escenas dulces de niños y mujeres y lo que más abunda son desnudos femeninos, que por sus formas recuerda mucho a Rubens. Y en cuanto a su especial estilo y su técnica se nota una notable influencia de Corot.
Renoir maneja una paleta de colores muy luminosa y vibrante que hace sea un impresionista muy especial. Cuadros como "Almuerzo de remeros", "El palco", "El columpio", "Baile en el Moulin de la Galette", y "Las grandes bañistas" son algunas de sus obras más especiales, más conocidas y más representativas.
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